Con riesgo de excomunión: trabajadores del Vaticano juran guardar secreto absoluto en el Cónclave

Mientras se afinan los últimos detalles para el inicio del Cónclave este miércoles 7 de mayo, el Vaticano ha realizado una ceremonia especial en la capilla Paulina donde limpiadores, cocineros, doctores, enfermeras, conductores y otros trabajadores juraron guardar absoluto secreto sobre todo lo que vean y escuchen durante el proceso de elección del nuevo Papa. Romper este juramento implicaría una excomunión automática.

Además de los cardenales electores, el Cónclave requiere un amplio equipo de apoyo que debe mantenerse completamente aislado dentro de los muros vaticanos para atender cualquier necesidad de los prelados, sin comprometer la confidencialidad del proceso. Los trabajadores, al igual que los cardenales, deben abstenerse de utilizar dispositivos electrónicos de grabación y están sujetos a estrictas normas de seguridad, incluyendo el uso de inhibidores de señal. Las normas sobre el secreto, reforzadas por Benedicto XVI en 2013, establecen que cualquier revelación, directa o indirecta, relacionada con las votaciones será sancionada severamente por la Santa Sede.

Fuente: AP.